LA ESTABILIDAD ES BUENA PARA LOS NIÑOS, ESPECIALMENTE AHORA
Sentirse seguro es bueno para los niños. Cuando pueden contar con una vida familiar con rutinas, esto les ayuda a sentirse seguros. Incluso la palabra "familiar" nos hace pensar en rutinas familiares conocidas y comprendidas por todos. Las rutinas establecen las bases para un desarrollo saludable.
Pero por supuesto, no todos los días serán exactamente iguales. Las cosas a veces cambian, y para algunos niños y adolescentes, demasiados cambios, especialmente en ocasiones especiales, son difíciles de afrontar. Entonces, ¿qué pasa cuando esas ocasiones especiales no van a ser exactamente las mismas? Ya sea por el COVID-19, o por alguna otra razón, a veces incluso los tan esperados eventos especiales tienen que ser diferentes de lo que se planeó originalmente.
APOYAR EL BIENESTAR AYUDANDO A LOS NIÑOS A SENTIRSE SEGUROS
Un niño o adolescente que se enfrenta a cambios inesperados puede sentirse ansioso o triste. Incluso, enojado o molesto. Es posible que no entienda por qué los adultos actúan de manera diferente, como por ejemplo, hablar con dureza porque están estresados. Los niños pueden preguntarse si es su culpa. Si esto continúa, la vida puede empezar a parecer impredecible. Puede surgir una sensación de incertidumbre.
No importa los cambios que sucedan, la sensación de seguridad de los niños se basa en saber que son amados y valorados. Mostrar esto a través de palabras y acciones es más importante que nunca en este momento. Si es posible, es mejor hacerlo en persona y cara a cara para que su hijo pueda usar todos sus sentidos disponibles cuando se conecte con usted.
Mantener una vida normal y rutinaria tanto como sea posible ayuda a los niños y adolescentes a sentirse conectados con usted e inmersos en la vida familiar. Esto los prepara para aceptar que aunque algunas cosas puedan cambiar, muchas otras permanecen iguales. Es algo parecido a poder agarrarse de un pasamanos o baranda cuando un autobús o un tren empieza a moverse - tener ese apoyo fijo ayuda a mantener el equilibrio, en caso de que las cosas den un giro inesperado.
EL BIENESTAR EMOCIONAL SE APOYA EN SIMPLES TRADICIONES FAMILIARES
En esta época del año, las tradiciones propias de su familia ayudan a evocar un sentido de constancia, y los patrones y ritmos de la vida traen consuelo e inspiran esperanza. Puede que tenga sus propias tradiciones religiosas o culturales. Puede que le guste cierta música o películas. Tal vez tenga dichos favoritos que todos reconocen. A algunos les gusta salir a pasear semanalmente o a diario. Podría organizar una noche de talentos o preparar un frasco de "lo que me gusta de ti", donde se coloca una nota cada día y se lee en voz alta cada mes.
Se puede construir sobre estas tradiciones y crear otras nuevas que transmitan la sensación de que la familia puede adaptarse, crecer y fortalecerse, incluso en estos tiempos difíciles. Este es un sello distintivo que fortalece a la familia.
Hablar y reírse juntos también desarrolla habilidades sociales. Otra forma de crear tiempo para esto es cocinar o hacer manualidades juntos, ¡incluso si no resulta exactamente como muestran las fotos!
Todo esto es importante porque los momentos positivos recuerdan a los niños que están en un ambiente familiar seguro y cariñoso. Es sólo un ejemplo de cómo los padres y los cuidadores tienen el poder de ayudar a apoyar el desarrollo físico, emocional, social y conductual de los niños y adolescentes. La capacidad de manejar las emociones, afrontar los cambios y llevarse bien con los demás puede ser fomentada por una crianza positiva.
CONFIANZA PARA HACER FRENTE A LOS CAMBIOS
Aunque las rutinas y tradiciones importan, también es importante entender cómo adaptarse y ser flexible. Las cosas pueden ser un poco diferentes este año. Los niños pueden afrontar mejor los cambios cuando saben de antemano qué será diferente y qué permanecerá igual. Cuando los niños mayores y los adolescentes sienten que tienen algo que decir sobre lo que está sucediendo, esto les ayuda a sentirse menos estresados y mejora su capacidad de adaptación. Esto puede apoyarse involucrándolos, si es posible, en discusiones constructivas y de resolución de problemas sobre cómo manejar los cambios.
USE SU CONOCIMIENTO
Puede usar la crianza positiva dentro de su propia familia. Puede hacerlo de la manera que funcione mejor para usted. Esto funciona en cualquier momento del año, no sólo ahora.
Las habilidades positivas e ideas como éstas hacen más fácil enfrentar el cambio y la incertidumbre, y le ayudan a sentirse seguro de que está apoyando a su hijo. También está tomando medidas importantes para promover su resiliencia y bienestar emocional.
Para aprender más sobre el desarrollo infantil y cómo puede apoyarlo con habilidades y estrategias de crianza positivas, pruebe un programa Triple P como Triple P Online u otros programas que puedan estar disponibles en su región.