Tomar medidas positivas cuando la vida parece un caos

A lo largo del camino de la crianza, habrá problemas con el trabajo, cambios en las relaciones y altibajos financieros. No puede controlar todo lo que ocurre, pero puede aprender a gestionar su reacción. Aprender a compaginar el trabajo, la familia, las relaciones y la crianza, sin perder la calma, requiere de práctica y tiempo, pero puede tener un gran impacto en usted y su familia.

EL ESTRÉS PUEDE ACUMULARSE SILENCIOSAMENTE

Con el aumento del número de personas que trabajan desde casa, muchos están descubriendo lo que los investigadores saben desde hace tiempo: los conflictos familiares pueden afectar al trabajo, y las preocupaciones laborales pueden repercutir en la vida familiar. La falta de trabajo y el aumento de los precios también pueden agravar el estrés, ya que la economía del hogar está bajo presión.

Todo esto puede repercutir en la crianza de los hijos. El estrés puede afectar la comunicación familiar, reducir la repartición de labores y aumentar los desacuerdos. El estrés puede trasmitirse de un miembro de la pareja al otro. El impacto del conflicto entre la pareja puede expanderse más de lo que esperamos: los problemas de comportamiento en los niños también pueden volverse más comunes. Y si esto ocurre, mantener la calma y consistencia con la crianza también se vuelve más difícil.

Durante el COVID-19, muchas familias han reportado un enorme aumento tanto en los niveles de estrés como en los problemas de comportamiento y otros, como la ansiedad en los niños.

Entonces, ¿qué puede hacer? Bueno, no se trata de hacer un esfuerzo sobrehumano de ser todo para todos. Se trata de intentar encontrar un equilibrio realista y tratar de enfocarse en lo que sí puede controlar.

Las rutinas son sus aliadas. Proporcione a sus hijos con las habilidades necesarias para ser más independientes, por ejemplo, para prepararse por las mañanas. Y permita que los niños ayuden con las tareas apropiadas para su edad, a medida que van creciendo. El programa de Triple P puede ofrecerle estrategias positivas para que el establecimiento de estas rutinas cotidianas sea un éxito.

CONSEGUIR UN MEJOR EQUILIBRIO PARA FORTALECER  LAS RELACIONES FAMILIARES

Cuando hay más estrés en la familia y en el presupuesto doméstico, estar consciente de sus emociones y tener algunas estrategias positivas es más importante que nunca. Estos son algunos consejos que pueden ayudarle si el estrés y la falta de equilibrio entre el trabajo y la familia le están causando problemas.

No tiene que poner en práctica todo lo que está en la lista al mismo tiempo. Sólo siga intentándolo, recordando que el objetivo es estar menos estresado y dejar de preocuparse por ser perfecto en todo momento.

• Vea lo que está en sus manos que puede cambiar. ¿Puede abogar por una carga de trabajo más flexible? Si el dinero es escaso, ¿puede hablar con su banco o con un servicio de asesoramiento financiero? ¿Puede negociar con su pareja la forma de compartir las tareas familiares para aminorar la carga? ¿Puede crear experiencias divertidas en casa? Adoptar un enfoque para la resolución de los problemas puede ayudarle a enfocarse en lo que está en sus manos, no en lo que está fuera de su control.
  
  
• Sea consciente de sus pensamientos y emociones, y desafíe la plática interna negativa. Por ejemplo, pensar que "las cosas nunca van a mejorar" aumenta enormemente el estrés. Un pensamiento más realista podría ser: "las cosas son difíciles en este momento, pero esta etapa no durará para siempre y hay medidas que podemos tomar para mejorar las cosas". La investigación demuestra la importancia de bromear y reír con sus hijos. Ser un padre tranquilo, positivo y comprometido, en la medida que pueda, protege a sus hijos a largo plazo de los efectos negativos de los momentos difíciles. Y si siente que no puede lograrlo y necesita más apoyo, acuda a sus amigos, familia o a algún profesional de la salud.
  
  
• Identifique los momentos de transición. Aproveche el tiempo de desplazamiento para hacer un esfuerzo consciente por desconectarse, y haga que su familia sea una prioridad cuando estén juntos. Del mismo modo, no se enfoque en los asuntos familiares cuando esté en el trabajo.

EN LAS FAMILIAS BIPARENTALES: MANTÉNGASE EN LA MISMA PÁGINA QUE SU PAREJA

• Cuidarse mutuamente (en el caso de tener una pareja u otros adultos que le ayudan con la crianza). Compartan conversaciones sobre sus problemas; y comparta las dificultades sin culpabilizar a nadie. Tenga una expectativa realista de usted y su pareja, pero también sea asertivo (no agresivo) cuando pida ayuda.
  
  
• Si uno de los padres, o ambos, dedican demasiado tiempo y energía al trabajo, intente mantener una conversación tranquila sobre las prioridades. Decidan lo que es realmente importante para ustedes como familia. Recuerde que no deben sólo enfocarse en las cosas materiales, sino también en el tiempo que pasan con sus hijos para favorecer su desarrollo emocional.
  
  
• Cada padre es responsable de encontrar formas para gestionar su propio estrés, sin aumentar el de su pareja. Por ejemplo, una manera de aminorar el estrés puede ser respirando profundamente y escuchando música, llamar por teléfono a un amigo o ir a caminar  a primera hora de la mañana, antes de que se despierten los demás. Escapar de los problemas pasando demasiado tiempo en el teléfono, abusando de la comida o el alcohol, o incluso trabajando de más, puede aportar sensaciones temporales de alivio, pero crea problemas a largo plazo y puede aumentar el estrés de su pareja. (Del mismo modo, no hay que insistir en dar ese paseo diario cuando eso significa evitar convenientemente hacer la parte que le corresponde a la hora del baño o de acostarse).